Después de desempolvar los cortantes para galletas el
domingo pasado, me quedé con ganas de seguir usándolos. Además hace demasiado tiempo que tengo almacenado casi un kilo de
bicarbonato de amonio, comprado con la intención de hacer
alfajores y galletitas. No es que no lo haya usado, pero es una cantidad casi industrial. Parece no disminuir... Digamos que a este ritmo tengo bicarbonato de amonio para toda la vida. :D
Por supuesto, entre la lista, siempre creciente, de recetas a probar había una de galletitas con este leudante químico. En realidad tengo varias en lista de espera, pero para
estas galletitas tenía todos los ingredientes a mano y me entusiasmaron por su simplicidad.
GALLETAS SIMPLES
250 g harina 0000
50 g manteca a temperatura ambiente
65 g azúcar blanca
pizca de sal
1 1/4 huevo
5 g bicarbonato de amonio
1 cda. leche
Se disuelve el bicarbonato en la leche y se mezcla con el resto de los ingredientes hasta obtener una masa homogénea. Se deja descansar en la heladera por lo menos un par de horas. Yo lo dejé un par de días. :D
Se estira la masa sobre mesada enharinada, se cortan las galletas y se ubican sobre una placa con papel manteca. Se enfrían en la heladera mientras se calienta el horno a unos 180°C. Antes de poner en el horno se pintan con huevo ligeramente batido con leche y sal. 12-15 minutos hasta que se doren ligeramente. Se tiene que evaporar completamente el amoníaco que se desprende en la
reacción. En el horno duplicaron ampliamente su altura, manteniendo su ancho.
Se conservan muy bien en una lata, siempre que no las ataquen las hormigas sibaritas que han invadido la pared medianera de casa.
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